Lo primero y esencial, el propósito principal de los aros en cualquier vehículo es su función. Sin embargo, para muchos de nosotros, también hay un aspecto muy importante de estilo en ellos. Cuando se trata de aros para carros, la aleación y el hierro son los dos materiales más populares en el mercado actual. Sí, hay fibra de carbono y algunas otras opciones, pero en general, todo se reduce a hierro y aleación. Debido al material por el que están fabricados, a los aros de aleación también se los conoce popularmente simplemente como aros de magnesio.
Con eso en mente, es posible que te preguntes ¿cuál es la mejor opción para tu vehículo, aleación o hierro? Echemos un vistazo más de cerca a las ventajas y desventajas de cada tipo de aro.
Aros de aleación: lo que necesitas saber
Como dijimos al inicio, aunque los aros están diseñados para cumplir un buen rendimiento y funcionalidad, muchos también los consideramos un complemento del estilo y personalidad de nuestros carros. Si estás en nuestro grupo, entonces los aros de magnesio o de aleación son el camino a seguir. De hecho, es la forma en que la mayoría de los fabricantes de automóviles han optado para estilizar los modelos que desarrollan, ya que los aros de aleación se han vuelto más populares que los de hierro en la actualidad. Los aros de aleación son elegantes, ya que se ofrecen en muchos diseños diferentes. También vienen en una variedad de tamaños y con varios acabados diferentes. Finalmente, los aros de aleación ofrecen beneficios de rendimiento sobre los de hierro. Combinan su naturaleza elegante y sus beneficios de rendimiento, convirtiéndose en un producto muy atractivo.
La razón clave por la cual los aros de aleación generalmente funcionan mejor que sus contrapartes de hierro es porque son de naturaleza más ligera. Gracias a esta cualidad más liviana, ejercen menos presión sobre la suspensión de un vehículo, permitiendo arrancar y parar más rápido; también permite una mejor economía de combustible. Si conduces regularmente en condiciones más exigentes, las llantas de aleación también pueden ser la mejor opción para ti, ya que son más capaces de disipar el calor de los componentes críticos del vehículo, como los frenos.
Si bien hay mucho que destacar de los aros de aleación, también tienen sus inconvenientes; como todo en la vida. Posiblemente el más grande, es que son más propensos a grietas, abolladuras y daños. Esto se debe a que la aleación es un material un poco menos duradero que el hierro, por lo que, si bien los conductores suelen elegir aros de aleación por su apariencia, su durabilidad también debe ser un factor que se tenga en cuenta al analizar las ventajas y desventajas de cada uno, según sus necesidades. Otro factor que podría impedir a los conductores ir por la ruta de la aleación es el mayor costo de estos aros en comparación con los de hierro. Por eso es importante considerar marca de aros que sean serias, ofrezcan garantía y un buen servicio al cliente.
Aros de Hierro: lo que necesitas saber
Los aros de hierro tienen dos grandes ventajas: son más asequibles y son más duraderos que sus contrapartes de aleación. En términos de esta última, es casi imposible romper un aro de hierro, una característica que lo convierte en una opción ideal para vehículos cuando se conduce en condiciones o terrenos más difíciles. Si bien es cierto que los aros de hierro pueden abollarse o doblarse, estas irregularidades generalmente se resuelven fácilmente martillando el material de nuevo a su forma adecuada.
A pesar de su costo y los beneficios de durabilidad, los aros de hierro también tienen varias desventajas notables. Por ejemplo, no se ven tan bien como los aros de aleación y tampoco hay una selección variada de modelos para escoger. Si bien puedes comprar tapacubos para tratar de mejorar su estética, su apariencia general puede ser un factor que no agrade a muchos. También, suelen ser propensos a oxidarse con facilidad afectando también la estética del auto.
La otra desventaja principal es que los aros de hierro pesan considerablemente más que los de aleación. Este exceso de peso puede potencialmente disminuir el centro de gravedad de un vehículo y generar mayor desgaste en la suspensión. También pueden afectar negativamente la economía de combustible de un carro, generando costos adicionales a largo plazo, y causar problemas de manejo y aceleración. Los aros de hierro pueden ser una opción ideal durante todo el año para vehículos que regularmente trabajan fuera de la carretera y camiones de trabajo pesado. Sin embargo, al no tener una buena disipación del calor debido a su material, generan mayor impacto y desgaste en las llantas.
Una desventaja final de los aros de hierro es que no son aplicables para todos los vehículos. La mayoría suelen estar disponibles en aros de hasta 16 pulgadas y no están diseñados para instalarse en vehículos fabricados para operar con aros de aleación con medidas de rin más grandes.
Entonces, ¿qué opción de aros es mejor para ti? ¿Aleación o hierro? Asegúrate de considerar las ventajas y desventajas de cada tipo.
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